#Entrevista| Bambalinas Deportivas, humor con total seriedad
Bambalinas Deportivas, emitida por UN3TV, apuesta al humor, con el deporte como excusa. Y a partir de esa premisa, va viajando por diez historias “coloridas y disparatadas”, tal como afirma su autor, Fernando Milsztajn. Él sabe de series webs, sabe de UN3TV: participó de Neuróticos, Cortos de Gigantes y Un Año sin Nosotros, todas para ser emitidas por el canal de la universidad. Ahora, esta nueva propuesta arriesga y busca calidad (y gana), se la juega y pide risas. Y las consigue.
¿Cómo fue el proceso de producción de la serie? ¿Hace cuánto comenzó el proyecto?
El proyecto se hizo largo por varias razones. Teníamos varias ideas pero tardamos en descubrir el formato. Después el hecho de que los actores varíen en cada episodio atentó contra un rodaje más apretado, filmamos más espaciado que en la anterior serie (Un año sin nosotros) también por factores climáticos que nos complicaron. La edición llevó más tiempo porque requería mucho trabajo de postproducción. En total habrán sido unos nueve meses de trabajo.
¿Cómo llegó la serie a UN3?
Yo ya había hecho Neuróticos y guionado Cortos de Gigantes en la primera tanda de contenidos de UN3, así que esa fue la puerta de entrada. Después junto a Tián Cartier y Martín Longo, de Calma Cine, hicimos Un año sin nosotros, que le fue muy bien. No fue difícil en ese sentido lograr que quisieran Bambalinas deportivas en su programación.
¿Cómo y porqué eligieron el formato de falso documental?
Sabíamos que queríamos hacer humor con el mundo deportivo, pero no sabíamos si serían sketchs estilo Monty Python, ¡Cualca!, u otra cosa. Primero definimos encuadrar las ideas detrás de personajes, después elegimos el falso documental. Estuvo siempre presente como referencia, tanto por algunos episodios de Portlandia como por el mundo cerrado de un aeropuerto de Come fly with me. Es un género que me gusta mucho, Zelig, This is Spinal Tap y el cine de Christopher Guest. Cuando ya la estábamos realizando descubrimos Documentary Now! Una serie que nos encantó y que iba por ese lado.
¿Creés que las series web están democratizando la forma de hacer ficción?
Hay más libertad y espacio para la experimentación, pero a la vez dentro de las series web no hay tanta variedad de estilos. Generalmente se apuesta al humor, muchos suelen utilizar lo autoreferencial o el falso reality, pero se está abriendo el juego de a poco.
¿Cómo invitarías a alguien a que vea la serie?
Me gustaría que la temática deportiva no aleje a muchos espectadores, porque partimos de eso para contar otras cosas. Son diez historias coloridas y disparatadas, muy distintas entre sí, y en cada una tuvimos que inventar algo nuevo para hacerla creíble a pesar del delirio absurdo del que partimos. El elenco es excelente y creo que logramos una gran calidad de imagen, en especial para el estándar de serie web. Puede ser una tontería, como suele ser el humor, pero la hicimos con total seriedad.
Mirá el primer capítulo: