Paul McCartney en La Plata: volvió la magia

Paul McCartney, un Beatle y sus canciones. Tan sólo eso alcanza, sea donde sea, sea con quien sea, para que se produzca algo mágico.

Miles de personas de todas las generaciones se hicieron presentes ayer en el Estadio Único de La Plata, en el marco del One on One Tour.

Exactamente las 21.12 dio comienzo el recital, con un plato fuerte como A Hard Day´s Night, donde los gritos y la locura de la gente no se hicieron esperar.

A lo largo de la noche sonaron canciones de todos los colores, siendo el patrón el mismo de siempre: la temperatura se elevaba y la nostalgia brotaba en su máxima expresión cada vez que sonaba un tema de los Fabulosos Cuatro, de los inmortales Beatles.

Gritos, saltos, bailes, lágrimas, muchas veces todo eso junto, era lo que fluía cada vez que sonaba uno de esos himnos.

Paul deleita con esas canciones que la banda de Liverpool tocó muy poco en vivo, y otras incluso que nunca lo fueron.

El repertorio incluyó además temas de los Quarrymen (banda anterior a The Beatles), de Wings y de su obra solista.

Idénticos a los que sonaron en el marco del Up and Coming Tour con el que visitó la Argentina en el 2010, fueron los homenajes a John y George, con Here today y Something respectivamente.

Casi 3 horas de show del eterno Mccartney. Siempre alcanza, pero nunca es suficiente. Imposible es que no queden joyas afuera. Las dos grandes ausentes en el tracklist de la noche platense fueron All My Loving y The Long and Windinig Road.

Muchos son los que sueñan con que Paul, algún día, concrete una gira mundial donde sólo toque temas Beatles.

A la tercera visita del músico inglés a la Argentina no se le puede reprochar nada.

Musicalmente impecable de la mano de Paul Wickens en teclados, Brian Ray en bajo y guitarra, Rusty Anderson en guitarra y Abe Laboriel Jr. en batería. Una puesta en escena a la altura de las circunstancias, y esa energía especial que lo caracteriza para conectarse con el público.

Tocó Paul, tocó un Beatle, hubo magia.