Review: Primal Scream- Chaosmosis
Primal Scream ha sido eventualmente una banda re inventiva. Venían de álbumes trasheros, de aquella combinación (o mescolanza) de relativo shogaze y un garaje de Detroit de fines de los 60’. Pero lo cierto es que después de algunos fracasos de ventas decidieron abandonar la formula de una banda con esencia tradicional de primera línea para pasar a formar parte de uno de esos productos de post-grabación. Screamadelica fue el quiebre de esa ejecución real de banda tipo convencional abriendo un camino, o un agujero, a un sonido más técnico, remixado y de grabación como un instrumento más en la sala de ensayo; más volumen al canal de sintes y loopeos y menos atención a las guitarras feroces a lo Ron Asheton.
Chaosmosis ha rebalsado el vaso de ese camino, acercándose al mainstream de una manera grandilocuente, pero dejando mucho que desear hasta para los oídos que solo quieren vender y no solo producir. Cayendo en lo convencional de su sello, y ya sin esa re invención como identikit, Chaosmosis peca de querer ser un disco totalmente pop, totalmente tecno pero sin esa esencia que sospechaba la banda presente hasta ahora.
El álbum se sostiene más de los estribillos que de los tempos electrónicos, lo que indicaría que es un disco todavía más pop que tecno, característico también de los últimos años como banda, solo que con canciones que son menos feroces y sacrificadas que las que podíamos escuchar en More Light o en los singles con Kate Moss.
Si algo vale la pena en Chaosmosis es solo su escena creativa y promocional de sus videoclips, como con su single Where the Light Gets In, que intenta ser, y con éxito, un video de la Velvet Underground subrayando su vuelta al ruedo como desde el fondo de la escena avant garde y chic de los 60’, tan característica y presente siempre en la imagen de la banda.