Review: Nave Hogar- Melodía Sin Descanso
Luego de casi tres años, Navë Hogar nos ofrece un nuevo material discográfico. El álbum se llama "Melodía sin descanso", y aunque la esencia de la banda siga siendo la misma, marca algunas diferencias con respecto a sus trabajos anteriores.
Principalmente, este segundo LP de Navë Hogar trae como novedad que cuenta, nada más y nada menos, con Mariano "Manza" Esain como productor. De este modo, el líder de Valle de Muñecas brinda su experiencia, y sin duda, hace que el grupo suene más compacto y seguro con su valioso aporte detrás. En palabras de los propios integrantes de la banda, Manza se encargó de ordenar la multiplicidad de ideas y arreglos musicales que rondaban en el seno de Navë Hogar.
A juzgar por el sonido del grupo, y pese a que suene un cliché decirlo, en esta oportunidad se los nota con un grado mayor de madurez. “Cuentas” (2013), y los Ep’s “Mientras” y “Navë Hogar” (2012), eran de un estilo más directo y punk. En "Melodía sin descanso", en cambio, se percibe que el tiempo que pasó entre su álbum anterior y este, sirvió para que los músicos armaran la dinámica y estructura de las canciones con cierta tranquilidad. A medida que transcurren los tracks del disco, sin embargo, podemos advertir que la banda mantiene una identidad power pop, noise y shoegaze. Es decir, influencias como Los Pixies, My Bloody Valentine, y el Soda Stereo de Dynamo, permanecen intactas. Eso no quita que ahora Navë Hogar suene más ajustado, y con el insoslayable dato que la banda cuenta con un nuevo integrante entre sus filas. En este sentido, vale mencionar que a Fernando Turenne en guitarra y voz, Valentino en bajo y Rodrigo Fernández en batería, en esta placa se le suma Luciano Maccione en guitarra.
Así, el grupo continúa basándose en un concepto alternativo y potente, con la inclusión de detalles sonoros que enriquecen sus temas. La lírica de los mismos, que generalmente apenas superan los tres minutos de duración, son pequeños mantras que se repiten a lo largo de las melodías. Es decir, música breve y letra de pocas líneas, lo cual no significa que la obra luzca efímera e inconclusa. Muy por el contrario, Navë Hogar sabe encontrarle el punto justo a cada una de sus piezas.
Por citar algunos ejemplos concretos, canciones como "Levantando lunas llenas", "Ya sé, sabes", "Fiestas de la fe", y "Le pongo al pecho", suenan tan intensas como bellas. Siempre con reminiscencias noventosas, desde El Otro Yo a Cadena Perpetua. En definitiva, Navë Hogar nos entrega un disco que deja apreciar la vitalidad y el desarrollo de la banda. Canciones urgentes, eléctricas; con la mente puesta hacia delante, y creciendo en el camino. Eso sí, con el innegociable espíritu jovial de su lado. De eso se trata.