Tierra de nadie
El director Matthew Heineman contó con el apoyo de Kathryn Bigelow en la producción ejecutiva del documental, famosa por películas como Punto Límite o Zero Dark Thirty y compartió durante una entrevista en el Festival de Sundance, su sensación mientras filmaba de no saber en qué bando se encontraba, si con los buenos o con los malos. Su objetivo fue permitir que la historia evolucionara orgánicamente, sin subjetividad, para que fuera lo más verídica posible y la verdadera intención es desafiar las creencias del espectador a través de la empatía, creando un debate vital que suplante a la intimidación. Que la frontera entre Arizona y el norte de México es una zona caliente no es ninguna novedad, pero el documental muestra la actitud de los ciudadanos respecto al combate, con un prisma diferente. La justificación de la violencia en México para la erradicación de los cárteles de la droga junto al discurso de un gobierno acechado por la corrupción, genera un movimiento social conocido como los Autodefensas y liderado en el Estado de Michoacán por el Doctor Mireles. Por otra parte, el grupo Arizona Border Recon declara no intentar reemplazar a las fuerzas del Estado, al estar organizados con un procedimiento de operativa público en internet y orientados a bloquear la inmigración ilegal controlada por las mafias.
Dedican su patrulla a detectar centinelas que controlan el tráfico desde lo alto de la montaña, para derribar la estrategia táctica del narcotráfico en la frontera. ¿Es realmente posible saber quién es quién en la lucha? Acabar con la corrupción basándose en la violencia solo crea más rencor, más venganza, más guerra.
Destaca el problema social de fondo que vive la República de México y la fina línea que existe entre lo legal y la justicia en una ciudadanía que ha perdido la confianza en las instituciones, abandonada a merced de mercenarios de la droga y carentes de mecanismos para controlar con garantías el cumplimiento de las leyes en sus funcionarios o en los propios ciudadanos. También resalta la necesidad de protección por parte del Estado de muchas empresas que generan trabajo pero acaban sometidas al soborno y control de los narcos. Es importante para la humanidad desafiar al poder político, corporativo o policial corrompido pero la forma de hacerlo, será condicionante en el resultado que afectará durante generaciones a la comunidad, más allá del conflicto inicial, tanto a los activistas, los criminales como también a las víctimas. Resulta muy interesante el personaje de Tim Foley, líder en la frontera de Arizona y el relato de su historia personal, que habla sobre el perdón, el compromiso y la necesidad de lidiar con los propios problemas para crear un verdadero cambio en el mundo, contrapuesto al final del mexicano Doctor Mireles.