Hitoshi Díaz: “Para mí, el mérito es hacer”
Proyectos futuros, influencias y los ídolos intocables. A días del estreno de Lexter: la ola perfecta, hablamos con Luis “Hitoshi” Díaz, su director y guionista.
¿Cómo llegaste a la idea de Lexter?
Trabajé once años como productor de radio y me venía cansando de las actitudes de los estudios grandes o mainstream, cosas del conductor y el director de radio que sentía que no me gustaban y empecé a sentir que ahí ya no era mi lugar. También estaba eso de tener que alcanzarle agua al conductor, o aguantar los berrinches del productor, algo que no te enseñan en las escuelas de periodismo y de radio. Como todo esto es una utopía, esto alguien lo tiene que saber, alguien lo tiene que contar. Quería hacer algo que tuviese que ver más con la música, el rock y lo que me gusta a mí. Así que me puse a repasar ideas. Entonces escribí una historia que tenga que ver con la música, sobre el punk rock. De ahí, de todo ese cansancio y ese aburrimiento mío arranca Lexter.
En la escena que se ve en la web de la película parece que tiene una impronta bastante humanista de querer contar a través de lo coloquial lo que le puede pasar a cualquiera. Nombraste como referentes a Apatow, Linklater, Kevin Smith…
Sí, de por sí es una película muy hablada, muy conversada. Yo siempre escribo guiones largos y me gusta hablar mucho con los actores. Para mi es más importante la charla con ellos que la puesta de cámara. La verdad que no le doy mucha bola a eso y en la película se nota porque no hay planos espectaculares ni nada de eso. Me interesa más contar historias. Después hay cosas que se van recortando, otras que van quedando afuera de los ensayos, sobre todo de Lexter, el personaje de Pablo Fábregas. Yo a él le dije que podía modificar el libro a su antojo. Él ha escrito guiones, hace stand- up, entonces le di esa libertad porque sabía que todo lo que tocara lo iba a mejorar. A mí me gusta que los diálogos sean así, más del día a día.
¿Esto que tiene Lexter del encuentro con un ídolo y que no sea lo que uno espera lo tomaste de alguna experiencia personal?
El lema de la película creo que es bastante claro. Esto de que los posters es mejor dejarlos en la pared. Yo tengo casi cuarenta años y soy muy admirador de lo que me gusta, pero me cuesta resistirme a la cosa cholula de la foto, el autógrafo, que me firmen un disco o una revista. Sí me pasa que con el correr del tiempo por las posibilidades de trabajar en medios vi que la gente es gente, seres humanos. Algunos son malos, otros son buenos. Algunos tienen mejor onda, otros menos y por ahí justo tienen un mal día y vos justo te los cruzaste. Por ahí no hay una experiencia personal concreta en la película. Hay muchas ideas y situaciones que se viven en radio pero nada particular. La película tiene testimonios de varias personas de radio desde Lalo Mir hasta Santiago Calori o Eddie Fitte. Pero cuando me preguntan si me faltó alguno digo que es medio obvio. Falta Mario Pergolini. A Mario yo lo escucho hace más de veinticinco años, es como una religión. Cuando tenía que laburar a la mañana, puteaba porque no lo podía escuchar. Después me tocó laburar con gente que trabajó con Mario y me contaban cosas que no quería saber. Yo quiero prender la radio y que él me transmita esa energía que tiene. Por eso al momento de tocarle la puerta dije que no porque por ahí lo agarraba en un mal día, o le parecía una mierda lo que estaba haciendo. Entonces, ¿para qué voy a destruir yo a mi propio ídolo?
En una entrevista dijiste que cuando escribís, tratás de consumir películas, series y cómics que se emparenten con lo que estás creando. ¿Cuáles conectaron con Lexter?
Yo siempre digo que Lexter es una mezcla de Casi famosos con Karate kid, por la estructura, que hay un maestro, un alumno al que parece que no le enseña pero en realidad sí. Muchos también me dicen que tiene que ver con Alta fidelidad, película que adoro. De hecho, hay una parte de Lexter que es un homenaje a una escena eliminada de Alta fidelidad. La radio ataca, de Oliver Stone, es otra película muy buena y que ayudó, hasta fue la primera que le di a Pablo para que viera. Partes privadas de Howard Stern también, porque es una película con testimonios sobre la radio. Hay muchos directores que me gustan, pero no sé hasta dónde puse cosas de ellos. El resto fue más inconsciente, por cosas que me van gustando y quedan. A mí me gusta mucho Spike Jonze, pero cuando voy a filmar no digo “voy a hacer esta toma como Spike Jonze” porque no soy así, soy más bien rústico. Para mí, antes que nada, el mérito es hacer.
¿Podemos decir que es para mantener la crudeza que va a tono con el tema de la película?
Sí, creo que eso coincide. La película es rockera, punk-rock, la calle, la noche. Tiene un poco esa estética rústica de los ochenta, un poco buscada, un poco por falencias mías. Ahora estoy empezando otro proyecto y ya lo pienso de una manera distinta, con otro presupuesto y con otro equipo. No es que voy a ir escalando hasta llegar a Titanic, trato de pensar cada película acorde a las necesidades de ese proyecto. Si una película la puedo hacer con un amigo no necesito veinte palos de presupuesto y catorce técnicos. Ahora sí, este próximo proyecto es la adaptación del libro Electrónica (2014), de Enzo Maqueira, y la historia ya me pide mucha más plata, pero sería un desperdicio no poder dársela.
¿Va a haber otra presentación después de la BA Comic?
Sí, va a ser algo más formal. También se la va a tratar como una película independiente real porque se le va a hacer difícil llegar a las cadenas o a los cines más normales donde no creo que llegue a tener una carrera. Además, para los estrenos lo más probable es que esté Pablo al principio y va a hacer como un espectáculo o respondiendo preguntas, porque esta historia nos permite hacerlo.
Lexter: la ola perfecta podrá verse el viernes 11 de diciembre a las 15:30 en la BA Comic.