"Mis películas crecen de a poco"
Hace muy pocos días se estrenó Cómo Ganar Enemigos, la nueva película de Gabriel Lichtmann. Por eso, Spoiler habló con él, en esta nota sobre Woody Allen, el judaísmo y las crueldades del mercado comercial.
¿Cómo definirías a Como Ganar Enemigos?
Cómo ganar enemigos es un thriller neurótico, es un poco el argumento de venta. Lo de neurótico es para hacer la diferenciación con el thriller psicológico, que es tenso y oscuro y ésta es un película más bien luminosa y más bien liviana, es una comedia con una trama policial. Es la historia de un joven que se llama Lucas que es abogado, en un café conoce a una chica, él la invita a salir, van a su casa y cuando él se despierta ve que le robaron todos sus ahorros que tenía en un cajón y él empieza a creer, ya que ella reunía todo las características para seducirlo, que alguien lo vendió. Por los datos que ella conocía sobre él, piensa que tiene que ser alguien cercano, un familiar o la gente de su trabajo. Empieza a sospechar de todos, Lucas es fanático de las novelas policiales y comienza a investigar sin medir las consecuencias.
¿Hay algún vínculo entre esta película y tu anterior, Judíos en el espacio?
Si hay un vínculo entre estas dos y el Séptimo día, un corto que yo hice pera Historias Breves en el 1999, 2000. Las tres tienen tres cosas en común: las recorren los vínculos familiares, el judaísmo, y cierta relación o reflexión sobre la ley y la tradición. Cómo ganar Enemigos tiene que ver con la ley, Judíos en el Espacio, tiene que ver con la familia y la Tradición y el Séptimo Día transcurren en una sinagoga, ahí está condensado todo: tiene que ver con la ley, la tradición, la familia. A mí los temas se me aparecen, si te dijera que cosas me interesan cuando voy al cine o a una librería te diría otras cosas, me interesa la política, la filosofía, ciencia ficción o una cosas más fuera de los cánones normales del mercado cultural, pero se ve que cuando me pongo a escribir me interesan las relaciones humanas, también te digo esto y mi director favorito es Woody Allen, su última película, Hombre irracional, me gustó mucho.
¿Vos te sentís parte del cine argentino o el cine argentino va por otro lado?
Yo me siento cercano a mi generación por afinidad, podría decirte que soy parte del nuevo cine argentino, me siento afín a Pablo Trapero, a Damián Szifron, a Daniel Burman, a Lucrecia Martel. Aunque mi cine tiene que ver conmigo, todos filman de manera muy distinta no sé si hay algo que nos empariente. En el cine argentino que surgió en su momento cada película era distinta y era una novedad, pero con los años se estandarizó, se empezaron a hacer películas “a manera de”.
¿Cómo es la expectativa en un festival y en el estreno comercial?
Yo tengo la sensación de que mis películas crecen de a poco. Un poco de eso pasó con El Séptimos Dia, hasta que apareció seleccionada para el Festival de Berlín. Con Judíos en el Espacio pasó algo parecido, la gente hoy la recuerda. Con Cómo ganar enemigos me gustaría que crezca más, porque creo que es lo mejor que hice, estuvimos en festivales y estamos recibiendo invitaciones todo el tiempo. Con el estreno comercial el mercado es más cruel, no te dejan crecer mucho.
¿Estás trabajando en nuevos proyectos?
Estoy trabajando en dos guiones, uno se llama Fernando, es una película de ciencia ficción que trascurre en Buenos Aires. No es en el futuro, no hay naves espaciales. La otra no tiene nombre pero es un policial. Veremos cuál se puede filmar.